Por Sebastián González Colaborador
Los videojuegos, o mejor dicho, las consolas de video juegos tienen un recorrido en el tiempo, incluso, mayor que muchos de sus usuarios. Estos artefactos nos han brindado desde hace mucho tiempo un escape a la realidad, una manera de olvidar los problemas o simplemente un rato de entretenimiento solo o con nuestros amigos mediante las plataformas online.
Lo que mantiene a los usuarios siempre al pendiente es la cantidad de juegos distintos que salen anualmente, unos de pago y otros pocos gratuitos. Los gratuitos generan mucha expectativa en el público, pero no muchos logran ser acogidos por las multitudes, por ejemplo, Fortnite es un excelente juego que tiene una parte de pago y una parte gratis la cual tiene millones de jugadores desde su estreno en 2017 gracias a no necesitar las membresías que tienen las diferentes consolas como el gold (xbox) o el plus (PS4).
¿Xbox o Play?
Pero ahora viene el gran interrogante, ¿las consolas como el PS4 o el Xbox one son una ventaja o una desventaja en la vida de adolescentes y niños? Desde un punto de vista comprensible esto podría verse como una ventaja para todo el público, al ofrecer juegos que pueden distraerlos y hacerlos pasar una rato más ameno, pero con su debido control porque es sabido que estar tanto tiempo frente a pantallas es malo para la salud; o si no se supervisa a los niños podrían jugar cosas no aptas para su edad.
Los videojuegos en condiciones de vida normales son controlados fácilmente por los padres al estar en temporadas estudiantiles y demás pero ahora en cuarentena se está viendo un incremento en las horas de juego de los usuarios, en condiciones normales, el tiempo de juego, en la mayoría de los usuarios es regulados por sus padres, a solo poder jugar algunas horas entre semana o jugar viernes, sábado y domingo, pero ahora en medio del encierro y el aburrimiento se ven obligados a ser más permisivos y permitir más tiempos de juego lo que puede llevar a adicción y a problemas de salud ya que algunos juegos pueden volver agresivos a los jóvenes y, además, fatigan la vista.
Mi recomendación
En conclusión, los videojuegos y las consolas son un muy buen pasatiempo y en medidas moderadas es beneficioso para la salud de los usuarios, pero en el momento que se convierte en una actividad descontrolada y el jugador no tiene ningún tipo de restricción se vuelve en algo nocivo para la salud y el comportamiento del usuario, una reflexión que debe quedar a los padres es que controlen los tiempos y sean muy atentos a los comportamientos que están tomando sus hijos y que tengan conocimiento de los juego que practican sus hijos sabiendo de que tratan y las modalidades de juego, porque al haber juegos buenos e inofensivos como el Fortnite, Mario Bros, Crahs, etc también hay juego enfocados en la delincuencia como Call of dutty, Grand Theft Auto, etc.
